TEST DE TEMPERAMENTO
Basado en el libro "El temperamento que Dios le dio"
Los temperamentos no son simplemente una teoría de autoayuda o un concepto psicológico moderno. Tienen raíces profundas en la espiritualidad católica y la teología moral, siendo reconocidos por autores espirituales como San Francisco de Sales.
Desde hace más de dos mil años, los temperamentos — colérico, melancólico, sanguíneo y flemático — han servido como un modelo para entender las diferencias en la personalidad humana. Estos temperamentos fueron propuestos 350 años antes de Cristo para explicar las diversas maneras en que las personas reaccionan emocionalmente.
Hoy en día, este concepto sigue siendo relevante para psicólogos, educadores, religiosos y escritores espirituales. Entender nuestro temperamento nos permite conocernos mejor a nosotros mismos, reconocer nuestras fortalezas y debilidades y, en última instancia, mejorar tanto nuestro crecimiento espiritual como nuestras relaciones personales.
Este test te ayudará a identificar tu temperamento dominante, brindándote una herramienta poderosa para crecer en virtudes y avanzar en el camino para alcanzar la santidad.
¿Sabías que...?
San Pablo Apóstol era colérico
San Pablo es conocido por su fervor y determinación. Nació en Tarso y fue inicialmente un perseguidor de los cristianos hasta su conversión en el camino a Damasco. Después de este evento, se convirtió en uno de los más grandes evangelizadores de la fe cristiana.
Su temperamento colérico lo hacía un líder decidido y apasionado en sus misiones.
Pablo enfrentó persecuciones y dificultades con una actitud firme y valiente, defendiendo la verdad y llevando el Evangelio a distintas partes del mundo, sin dejarse vencer por los obstáculos.
El temperamento de
Santa Teresita del Niño Jesús
Santa Teresita de Lisieux, también conocida como “la Pequeña Flor”, es famosa por su espiritualidad profunda y su amor a Dios a través de “la pequeña vía”. Nació en Alençon, Francia, y desde niña mostró una inclinación espiritual y un sentido de sensibilidad hacia el sufrimiento.
Teresita tenía un temperamento melancólico que se reflejaba en su profunda introspección y en su capacidad para encontrar sentido en el dolor y la humildad.
A pesar de su fragilidad y enfermedades, vivió una vida de sacrificio y entrega en el convento, dejando una enseñanza de amor sencillo y entrega total a Dios.
San Francisco de Asís
y su temperamento sanguíneo
San Francisco era extrovertido, optimista y tenía un carisma natural que atraía a las personas. Nació en Asís, Italia, y en su juventud fue un joven alegre y algo despreocupado hasta que experimentó una conversión que lo llevó a vivir en pobreza y simplicidad.
Con un temperamento sanguíneo, Francisco disfrutaba de la compañía de otros, era cálido y entusiasta, y no temía expresar su amor por Dios en público.
Su alegría y amor por la creación de Dios lo hicieron muy popular, y fundó la orden franciscana, inspirando a miles con su humildad y cercanía.
Santo Flemático
San Francisco de Regis
San Francisco de Regis (1597-1640) fue un sacerdote jesuita francés conocido por su carácter amable, paciencia y vida de servicio. Nació en Fontcouverte, Francia, y desde temprana edad mostró una inclinación hacia la fe y la ayuda a los más necesitados. Ingresó a la Compañía de Jesús (los Jesuitas) a los 19 años, donde su temperamento pacífico y humilde lo hizo destacar.
Francisco dedicó su vida a la predicación en zonas rurales de Francia, llevando la palabra de Dios a lugares donde había poco acceso a la educación religiosa. Su enfoque flemático se manifestaba en su calma y empatía hacia las personas, especialmente hacia los pobres y marginados. Durante su vida, luchó contra la injusticia social y ayudó a muchas personas en situaciones de pobreza y desesperación.
A pesar de los desafíos, Francisco siempre mantenía un espíritu de paz y era conocido por su serenidad y su disposición para escuchar y acompañar a los demás. Murió en 1640 y fue canonizado en 1737. Hoy es recordado como un ejemplo de paciencia y dedicación, especialmente en el trabajo pastoral con comunidades rurales y desfavorecidas.
Santos de temperamento Colérico
1. San Pablo Apóstol - Apasionado y enérgico en la predicación.
2. Santa Catalina de Siena - Defendió la Iglesia y fue una líder espiritual decidida.
3. San Ignacio de Loyola - Fundador de los Jesuitas, con una gran visión y disciplina.
4. San Pedro Apóstol - Ferviente y a veces impulsivo en su liderazgo.
5. San Jerónimo - Conocido por su carácter fuerte y su dedicación a la traducción de la Biblia.
6. Santa Teresa de Ávila - Reformadora decidida del Carmelo y escritora mística.
7. San Juan Bautista - Directo y firme en su mensaje de conversión.
8. San Francisco Javier - Misionero con un espíritu apasionado y aventurero.
9. San Bernardo de Claraval - Líder con gran influencia, defendió la fe en debates teológicos.
10. Santa Juana de Arco - Lideró con valentía y determinación durante la Guerra de los Cien Años.
Santos de temperamento Melancólico
1. Santa Teresita del Niño Jesús - Profundamente introspectiva y sensible.
2. San Juan de la Cruz - Poeta místico, reflexivo y contemplativo.
3. San Benito de Nursia - Monje fundador, buscó la paz y la disciplina interior.
4. Santa Gemma Galgani - De carácter espiritual profundo, amante de la soledad.
5. San Damián de Molokai - Dedicado al cuidado de los leprosos, con gran sensibilidad hacia el sufrimiento.
6. San Pío de Pietrelcina - Conocido por su devoción y su vida de oración intensa.
7. San Alfonso María de Ligorio - Escritor y pensador profundo en la teología moral.
8. Santa Brígida de Suecia - Visionaria con una fuerte inclinación espiritual.
9. San Luis Gonzaga - Famoso por su carácter serio y devoto desde muy joven.
10. Santa Rosa de Lima - Se retiró en penitencia y oración, buscando una unión íntima con Dios.
Santos de temperamento Sanguíneo
1. San Francisco de Asís - Alegre, amoroso y cercano a todos, especialmente a la naturaleza.
2. San Felipe Neri - Conocido como el “Santo de la Alegría”, con gran sentido del humor.
3. San Juan Bosco - Cálido y entusiasta en su misión con los jóvenes.
4. San Antonio de Padua - Gran predicador, simpático y muy querido.
5. Santa Teresa de los Andes - Alegre y con un carácter amigable, incluso en su vida de claustro.
6. San Martín de Porres - Afectuoso y bondadoso, siempre buscando ayudar a otros.
7. San Andrés Apóstol - Cercano a su hermano Pedro, ayudaba a conectar personas con Jesús.
8. Santa Bernadette Soubirous - Inocente y amistosa, se mostró siempre alegre en su humildad.
9. San Vicente de Paúl - Amable y sociable, fundó congregaciones para ayudar a los pobres.
10. San Francisco de Sales - Conocido por su dulzura y paciencia en su trabajo pastoral.
Santos de temperamento Flamático
1. San Juan XXIII - Pacífico, calmado y diplomático.
2. San José de Cupertino - Tranquilo y humilde, conocido por sus visiones.
3. San Camilo de Lelis - Con gran calma y dedicación atendió a los enfermos.
4. San Benildo Romançon - Amable y sereno en su vocación de maestro y guía espiritual.
5. Santa Isabel de Hungría - Compasiva y generosa, vivió en paz en la caridad.
6. San Benito José Labre - Llevó una vida de calma y penitencia como peregrino.
7. San Rafael Arnáiz - Tranquilo y resignado en su sufrimiento y vida contemplativa.
8. San Cristóbal de Licia - Protector de los viajeros, conocido por su paciencia y fortaleza.
9. San Francisco de Regis - Pastor calmado y dedicado a su comunidad rural.
10. San Francisco de Paula - Fundador de una orden de ermitaños, con vida pacífica y sencilla.